Del año en que nací. La guitarra de Mark Knopfler es inconfundible. Sultans of swing es un melocotonazo.
Recordatorio: no mezclar más de 3 drogas en una noche. Aunque no tenga nada que ver con lo que escucho habitualmente (o sí), musicalmente es una pasada.
Una ópera pop en donde todo te suena, porque los has escuchado por todas partes sin darte ni cuenta. Qué sería de todos nosotros sin ABBA...
Imprescindible para comenzar el siglo XXI. Rock and roll comercial + un poco de fusión + mucho postureo = un clásico