Overrated to my ears.

He escuchado este álbum varias veces, y no logro tomarle el gusto, aunque reconozco que puede que tenga valor histórico. Las composiciones me suenan extrañas. Los cambios armónicos, si bien causan sorpresa, están a un grado de provocar grima. Tal vez para la próxima escucha pueda digerirlo mejor.

Nunca había escuchado algo de esta banda y no soy muy fan del new wave, así que no encontré este álbum particularmente disfrutable. Quizás en su época haya sido transgresor, lo que le añadiría a su calidad de "clásico de nuestra época", según otros comentaristas que lo califican así. La música es energética y animada, como se espera del género, los instrumentos están bien tocados y los estribillos son pegajosos. Algunos pasajes remiten constantemente a otras cosas que he escuchado antes de los B-52's. La mezcla es agradable y funciona bien con mis monitores de escritorio. Los bajos están balanceados y los agudos no son demasiado estridentes. La tarola es prominente, pero no llega a ser desagradable. El único tema que encontré sorprendente durante mi primera escucha ha sido "Automatic" que tiene una vibra más sombría por cómo juega con los silencios y el arpegio que sirve de base para toda la canción. El álbum se sostiene bien pasan los temas, y podría decir que incluso mejora hacia el final. Tanto las letras como la música no exigen demasiado intelectualmente, lo que hace de este álbum un buen álbum para escuchar mientras se realiza alguna otra actividad.

Gran álbum. Cada vez que lo escucho me llena la cabeza de recuerdos y sensaciones de la infancia. Tengo un gran vínculo emocional con esta música. Este disco está lleno de temas poderosos y está bien balanceado en dinámicas, con canciones vigorosas y otras sutiles y hasta delicadas. Sin duda viene bien a esta lista.

Joya. Nada suena como Portishead.

Hermoso album. Gran evocador de recuerdos de la infancia.

La única pieza que me gustó fue Homeless, que presenta voces a capella que armonizan en estilo africano, lo cual se explica por el hecho de que buena parte de este álbum fue grabado en Sudáfrica. El resto de los temas son planos, carentes de dinámica, y Simon falla en transmitir emoción alguna en su voz. Supongo que ese es su estilo, pero a mi no me gusta. You Can Call Me Al se rescata simplemente por los recuerdos que evoca de mi infancia.

No está mal. Tiene una vibra grunge alternativa, algo entre Pixies, Bush y Soul Asylum. La mayoría de los temas son oscuros y pausados, con buena dinámica, lo que los hace entretenidos para mi gusto. En la primera escucha no encontré algún tema sobresaliente, aunque eso no quita mérito al álbum como uno que se puede escuchar facilmente de principio a fin.

Buen álbum, satisfactorio de escuchar. Buena incorporación de los sonidos del sintetizador a la música de jazz moderno, que por momentos coquetea con su versión latina. La primera escucha se pasó rápido y agradable. Definitivamente una adición a la fonoteca.

Buena música. Pasa rápido y al terminar de escucharlo dan ganas de volver a empezarlos de nuevo, pues uno se queda con la sensación de que no ha puesto atención suficiente y se ha perdido de algo.

Un álbum conciso, repleto de buenas canciones, sin muchas pretenciones. Además contiene una de las canciones románticas más icónicas de la historia de la música pop.

¡Qué música más suave que esta! Una joya del soul. Super fácil de escuchar, placentero y sensual, que nos recuerda que la música no tiene que ser estruendosa para ser buena.

Cursi y empalagoso como miel. No me gusta mucho.

Un álbum que escuché hasta el cansancio en su época. Algunas canciones no han envejecido bien y otras son timeless hits indiscutibles.

Punk clásico. Música desparpajada, desprolija, pero encantadora. Un reflejo de su época y de la rebeldía adolescente descarrilada.

Algunas canciones cásicas, pero no me encantan.

La producción es típica de los 80's, con sonidos que evocan grabaciones de Stevie Wonder y Gino Vanelli, de la misma época. El álbum contiene muy buenos temas, algunos con armonías interesantes y poco predecibles, que se encadenan agradablemente para crear una atmósfera relajada que colorea entre el blues, el soul y el soft rock.

Una delicia para escuchar por la mañana o tarde en la noche. Tiene una vibra "lo-fi" que lo hace particularmente relajante y fácil de escuchar mientras se hace otra cosa.

Muy psicodélico y generalmente aburrido.

Lo escucho por primera vez y de inmediato me recuerda a The Stone Roses. Irrelevante para mi.

Canciones cortitas, agradables al oido, interesantes y bien tocadas. Música de 1972, y se nota en la onda medio hippie que transmite, combinada con "Nueva Trova", pasajes que van de lo afro-brasileño a lo sevillano.

Un clásico gigante del punk. Hoy no suena tan trasgresor como seguramente fue en su época. Por momentos repetitivo, pero divertido, simple y directo. Ningún tema sobrepasa la barrera de los 3 minutos, así que se va rápido.

Una obra maestra. Los Beatles en su prime, especialmente Harrison.

Jazz frenético y virtuoso.

El primer disco de Siouxsie muy punk. Diferente del rock más refinado al que nos acostumbró con trabajos posteriores. No es malo, pero no me encantó.

Leyendo sobre Robert Wyatt me entero que es un compositor de rock progresivo que graba sus álbumes tocando él mismo todos los instrumentos. Si bien este album se desvía de esa tradición, se puede notar el aspecto progresivo de la música con armonías al estilo Pink Floyd o David Bowie, aunque por momentos logra generar ambientes más bien country o jazz, quizás por los instrumentos que se utlizan a lo largo de la grabación. Baterías suaves, guitarras acústicas y pianos son los elementos constitutivos en la mayoría de los arreglos.

Junto con St. Germain, uno de los pocos discos de DJ y música electrónica que me gustan. Bien por este que fusiona múltiples géneros y no se encasilla en el típico "punchis-punchis".

Escuché este album hasta el cansancio. Muchos temas memorables que remiten inmediatamente a mi juventud. Definitivamente parte del soundtrack de mi vida.

Rock buenaondita, punk con influencias de Queen.

Música electrónica de principios de los 90's con sabor orgánico que se aleja del pop o a la música bailable, y se inclina hacia el trip-hop, más vocal y pausado. Digerible y fácil de escuchar como soundtrack ambiental.

Un clásico. Eagles, en sus inicios, eran una banda de country con matices de rock y pop, y este álbum captura la esencia de esa época. Lo que más me gusta es la delicadeza con que están tocados todos los instrumentos y la armonía impecable de las voces. Desde el primer acorde de "Take It Easy", es imposible no sentirse trasladado a un roadtrip imaginario, de paisajes abiertos, atardeceres dorados y la libertad del camino.

Música country estándar.

Música minimalista, mal tocada y mal cantada. Punk mal hecho. Tampoco me parece que los temas sean tan originales.

Joya del Heavy Metal que sentó las bases para todo lo que vino en las décadas siguientes. Imperdible.

No es la mejor obra de The Beatles, pero igual contiene algunos de sus temas más emblemáticos que se entrelazan con varios otros que se sienten como de relleno.

Trabajo súper interesante. Nunca lo había escuchado y me gustó. Tiene melodías y armonías originales con esa vibra ochentera sintética pero sin llegar a ser plástica.

Joya de joyas que, escuchado hasta el hartazgo en décadas pasadas, vale la pena desempolvar. Una obra compleja y pretenciosa conceptualmente, que genera una atmósfera sombría adecuada para un día lluvioso. Logrado de manera impecable, este disco subió muy cañón la vara de lo que se podía hacer nivel de producción, ejecución y creatividad. Los temas más choteados, como Another Brick in the Wall y Hey You, cobran una dimensión diferente cuando se escuchan en el contexto de la obra completa. Una hora y veinte muy bien invertidas.

Hoy en día no suena tan espectacular, pero estoy seguro que escuchar eso en 1978 debe haber volado la cabeza de mucha gente y quizás encontrado múltiples resistencias en el mundo de los melómanos. Una joya imperdible.

Se trata de uno de los proyectos de Damon Albarn, vocalista de Blur y Gorillaz. En este se hace acompañar por el exmiembros de The Clash y The Verve. La música va de lo folk al brit pop y es como una versión simplificada pero experimental de Blur. A menudo los sonidos de los sintetizadores y otros efectos, se integran con la batería, bajo y guitarra que tienen un sonido más orgánico y menos procesado, lo que crea una extraña atmósfera. Creo que los tracks que más me han gustado son aquellos donde la guitarra acústica sobresale y se acompaña con la percusión y el contrabajo. Recomiendo tracks 1, 8 y 10.

Música original y arreglos diferentes que definitivamente le envisten de una personalidad única a la música de los White Stripes. Un buen álbum.

Album lleno de joyas musicales emblemáticas de una época en la que todo era nuevo y el horizonte estaba lleno de nuevas ideas que se materializaban gracias a los avances en las técnicas de grabación de la época. Hay una leyenda que cuenta que John Bonham grabó la batería de este disco con sólo dos micrófonos y colocando su instrumento en el cubo de la escalera del edificio donde se encontraba el estudio. Esto le dio un sabor muy peculiar al sonido de los tambores y se puede notar en varios momentos a lo largo del disco.

Música experimental monótona. La versión remasterizada suena muy bien, para ser una grabación tan antigua. Aburrido en general.

Creo que este album está sobrevalorado. Será porque nunca he logrado conectar del todo con el trabajo de U2, pero me parece bastante estándar en cuanto a inovación y calidad interpretativa. La grabación y mezcla es excelente, pero nada más.

La música sombría que hizo famosos a The Cure. Este disco de 1980 es simple pero bien tocado, se puede notar la alineación de estilos con sus contemporáneos de Joy Division, lleno de acordes oscuros que traen a la imaginación fiestas de vampiros, hombres lobo, espectros y otras creaturas nocturnas. Muy alejado de lo que después entregaron en álbumes como "Kiss me, Kiss me, Kiss me" y "Desintegration".

Buen hip-hop.

Música electrónica pionera. Se notan las limitaciones técnicas de la época pero no queda corto en creatividad. Se crean atmósferas agradables pero un tanto extrañas. Lo volvería a escuchar.

Esta lista tiene muchos discos de new wave y no me gusta.

Nunca he entendido el hype alrededor de Daft Punk. Creo que más bien es mitológico, que basado en demostraciones de talento. Este disco es olvidable. El tema Around The World que sonó hasta debajo de las piedras en su tiempo es lo único memorable, y no por bueno, sino por repetitivo y monótono. Lo demás es remix genérico de CD del metro.

Cosa experimental horrible. Tomaron el Sgt. Pepper e hicieron una parodia psicodélica de él. Poco valor en este disco.